Hace unos veinte años viajé a Oporto por primera vez. Fue un viaje fugaz, apenas un suspiro y la impresión que me dejó aquella ciudad, entonces decadente, no fue precisamente favorable. La verdad, volver no estaba en mis planes. Sin embargo, una pequeña aprendiz de viajera, que aún no conocía Portugal, me convenció para regresar. Hoy me alegro de haberlo hecho, porque esta hermosa ciudad me ha sorprendido gratamente y ha despertado en mí el deseo de visitarla muchas más veces. Nos alojamos en el barrio de Boavista, muy cerca de la Casa da música .  Esta zona nos sorprendió gratamente: está a unos 20 minutos a pie del centro, pero si no te gusta caminar, cuenta con una excelente red de metro. Si prefieres moverte en transporte público, te recomiendo adquirir la tarjeta Andante, válida para metro, autobuses y trenes de cercanías gestionados por la STCP. Existen varias modalidades, pero la Andante Tour, diseñada especialmente para visitantes, es la ...